«Tenemos derecho a conocer los planes locales de explotación minera: nuestro futuro está en juego»
Novedades y recursos
Por Sherly Siahaan, representante comunitaria
No cejaremos en nuestra lucha por acceder al permiso de explotación minera en nuestro territorio.
A veces la llaman mina de estaño, a veces de diamantes. Cuando era pequeña, la gente decía que aquí había oro. Pero ahora ha llegado una empresa minera y ni siquiera sabemos qué va a extraer de nuestra tierra. No sabemos nada de sus planes. La empresa y las autoridades no nos dicen nada.
Sin embargo, tenemos derecho a tener información sobre las decisiones que nos afectan. La minería en nuestra región podría devastar nuestras vidas tal y como las conocemos hoy. Por eso nuestra comunidad lleva años intentando acceder al contrato y a los planes mineros.
Vivimos en Dairi, en la provincia de Sumatra Septentrional (Indonesia), una zona muy fértil con captación de agua, donde la agricultura proporciona un medio de subsistencia seguro. En 2017, nuestra tranquilidad fue sustituida por el miedo y la incertidumbre. Nos enteramos por los medios de comunicación de que una empresa minera había recibido una prórroga de licencia de nuestro gobierno, que le permitía explotar una mina durante 30 años en una zona local protegida, lo que afectaba a 11 aldeas: varios miles de personas. Sin embargo, nadie nos dijo nada.
Cuando intentamos averiguar qué pasaba, Dairi Prima Mineral (DPM) se limitó a organizar una pequeña sesión de sensibilización con un público selecto, que excluía a nuestra comunidad. Más tarde nos enteramos de que habían prometido prosperidad y puestos de trabajo en la mina, pero no habían dado detalles de cómo esto sucedería.
Luego empezaron a construir infraestructura en nuestras tierras. Con alarma, pedimos a las autoridades que nos dieran acceso al permiso minero, pero las y los funcionarios locales respondieron que no sabían nada y que el contrato lo había firmado el gobierno central. Así que escribimos varias veces al Ministerio de Energía y Recursos Minerales pidiendo los documentos. La respuesta del Ministerio fue frustrantemente lenta. Finalmente, la persona encargada de la información nos escribió diciendo que los detalles del permiso estaban en su página web, pero por más que buscábamos, sólo podíamos encontrar el número del permiso, nada más.
Sin embargo, la Ley nos da derecho a acceder al permiso.
Las leyes indonesias sobre minería y acceso a la información pública respaldan la transparencia de los contratos. El acceso público a los documentos es también un principio fundamental de la Iniciativa para la Transparencia de las Industrias Extractivas (EITI), a la que Indonesia se adhirió en 2010. En 2019, cuando el Ministerio siguió ignorando nuestras peticiones, presentamos una demanda ante la Comisión Central de Información con el apoyo de varias organizaciones de la sociedad civil locales y nacionales, como Bakumsu, JATAM, YLBHI y PWYP Indonesia, reclamando nuestro derecho a la información completa sobre los planes mineros.
Para nuestra consternación, no supimos nada durante tres años, hasta que nuestro caso se llevó ante el Tribunal Administrativo en 2022. Las y los jueces de la Comisión de Información dictaminaron en enero de 2022 que debíamos tener acceso al contrato y a los últimos planes mineros. Aunque agradecimos esta sentencia, seguimos sin saber nada. El Ministerio se negó a entregar cualquier documento, impugnando la decisión. Aunque el Tribunal Administrativo del Estado confirmó la decisión de la Comisión en julio de 2022, el Tribunal Supremo aceptó posteriormente el recurso del Ministerio. Pero, ¿qué intentan ocultar?
Nuestra comunidad seguirá luchando. Sin embargo, durante todos estos años se nos ha excluido y hemos vivido en la incertidumbre. Tememos por nuestro futuro y el de nuestras y nuestros hijos y nietos. ¿Se estropearán o perderán nuestras tierras de cultivo y nuestra agua a causa de las explotaciones mineras? Quiero animar a las y los habitantes de Dairi y de Indonesia a que hagan valer sus derechos. La transparencia y la información completa son muy importantes. Necesitamos saber qué se nos propone para poder participar en las decisiones que nos afectan. Nos espera una larga espera, pero no nos rendiremos. Nuestro futuro está en juego.