Filipinas – Generación de confianza: un ingrediente esencial de una coalición eficaz

Introducción

Bantay Kita-PLQP Filipinas ha creado un modelo organizativo para la coalición que busca conseguir un equilibrio entre una estructura formal y la proximidad a las comunidades a través de relaciones basadas en la confianza y un compromiso con elevar las voces de la comunidad.  

Acerca de la coalición 

La coalición PLQP Filipinas, Bantay Kita (que en este documento abreviamos como BK-PLQP), es única en su enfoque sobre las cuestiones de gobernanza de los recursos naturales en Filipinas, y sus objetivos estratégicos armonizan estrechamente con los de la estrategia global Visión 2025 de PLQP. Se formó en 2009 en torno a la necesidad de fortalecer la rendición de cuentas en el sector extractivo y ha sido muy activa en la implementación de la Iniciativa para la Transparencia en las Industrias Extractivas (EITI) de Filipinas, que comenzó en 2012. 

La coalición es la segunda en tamaño dentro de la red de 80 miembros de PLQP, muchos de las cuales (cerca de tres cuartos) son grupos locales ubicados a una distancia considerable de Manila, algunos en zonas muy lejanas. La membresía abarca diversos idiomas y culturas. Incluye también diversos puntos de vista sobre la extracción, desde quienes se oponen a la explotación minera con impactos sociales y ambientales negativos, hasta aquellos más enfocados en la transparencia y la rendición de cuentas de la extracción (sin cuestionar si la extracción debiera o no realizarse). La membresía de la coalición es, además, muy diversa en cuanto a los tipos de organización, ya que varía desde aquellas con sede en Manila que poseen especialización técnica en temas de transparencia, divulgación de datos y marcos de gobernanza de recursos naturales; hasta organizaciones que representan a grupos de personas directamente afectadas por la explotación minera (consultar más detalles en la tabla incluida al final de este documento). 

Salvar las distancias entre el ámbito local y el nacional 

La estructura de la coalición está diseñada para ayudar a reducir las diferencias en las preocupaciones a nivel nacional y en las comunidades; y la coalición es partidaria de emplear marcos de gobernanza nacional más sólidos buscando, a la vez, crear sistemas locales de rendición de cuentas. Esto se logra impulsando a las comunidades afectadas por la explotación minera para que aborden sus asuntos a través de grupos multi partícipes (GMP) a nivel local, pero con la opción de escalarlos a través de la coalición hasta el nivel nacional, cuando sea necesario. Algunos de estos grupos multi partícipes están vinculados a la implementación de EITI, así como a otras estructuras locales y regionales de toma de decisiones.

Debido a la forma y la complejidad de la coalición, la clave para su buen funcionamiento es su Secretaría altamente organizada, que lleva a cabo amplias consultas abiertas entre sus miembros a fin de generar y mantener la confianza.

Generalizar un modelo multi partícipe

Si bien EITI y la divulgación de datos es un agenda central de la coalición, BK-PLQP también busca  actualmente impulsar que las comunidades y grupos ciudadanos promuevan la rendición de cuentas en cualquier asunto relevante en relación con la extracción a nivel local. Por tanto, la estrategia de la coalición se enfoca en impulsar la formación de grupos cívicos que participen en foros multi partícipes y ejerzan su poder a nivel local. BK-PLQP intenta no limitar los foros de participación a estructuras tipo los GMP de EITI, sino que reconoce también el potencial de empoderar a los grupos ciudadanos para que utilicen otros espacios existentes, como los consejos locales o regionales de desarrollo. La coalición obtuvo financiamiento de USAID, por ejemplo, para ayudar a empoderar a grupos cívicos a fin de que accedan a la toma de decisiones de esta manera. Según el Código de Gobierno Local de 1990, ciertas facultades sobre el sector extractivo las tienen las localidades, mientras que otras, como determinadas decisiones relativas a las licitaciones, siguen siendo competencia de Manila. El objetivo es que, cuando los asuntos locales puedan resolverse a nivel local, las comunidades no estén obligadas a recurrir al nivel nacional. Pero cuando las disparidades de poder entre las empresas, el gobierno local y las comunidades impliquen que estas no pueden hacerse oír a nivel local, los grupos comunitarios pueden amplificar sus voces para ser escuchados a nivel nacional, con la ayuda de las y los miembros de Manila.  

Adaptar los enfoques a fin de que sean más relevantes para las comunidades 

La Secretaría de BK-PLQP busca también adaptar los proyectos de la coalición a fin de que sean más relevantes para las comunidades. Una manera de lograrlo es identificar los asuntos comunitarios, como punto de partida, y después reflexionar sobre cómo EITI u otros datos pueden o no ayudar a resolverlos, en lugar de aplicar una mera «solución basada en datos» cuya relevancia podría ser únicamente marginal. La implementación de EITI a nivel nacional puede tener poca relevancia para las comunidades, que quizás tengan inquietudes específicas tales como la ocupación de tierras de pueblos originarios sin una consulta adecuada. BK-PLQP busca aportar mecanismos a nivel territorial que impulsen a las comunidades a solicitar la rendición de cuentas por estos asuntos a nivel local a través de grupos multi partícipes locales, a menudo en situaciones donde las comunidades antes sentían que no tenían voz. 

La Secretaría de BK-PLQP aprendió también que el mero hecho de hacer que los datos sean accesibles no genera cambios. Para poner este aprendizaje en práctica, la coalición comenzó a trabajar con los pueblos originarios a fin de darles herramientas para que ejerzan acciones de incidencia en asuntos que preceden y/o van más allá del acceso a los datos y la información sobre regalías, para exigir derechos fundamentales reconocidos en la Ley de Minería y en la Ley de Derechos de los Pueblos Originarios. Como resultado, la Secretaría de BK-PLQP observó un «aumento en la confianza» de las y los miembros de las comunidades gracias a su mayor conocimiento de los derechos reconocidos por la ley. Durante el proceso de generación de estos conocimientos, BK-PLQP impulsó también a las comunidades indígenas para que solicitaran datos relativos a las políticas y proyectos de desarrollo en sus territorios ancestrales, a fin de que participen de manera significativa en debates sobre la gobernanza de los recursos naturales y tomen decisiones sobre sus propias tierras.

Liderazgo de la coalición 

La coalición tiene una membresía muy activa y organizada, así como una sólida Secretaría que considera que su rol principal es posibilitar que las y los miembros dirijan la coalición, mantener las actividades en marcha y garantizar la participación de las y los miembros. El énfasis de la Secretaría es facilitar o impulsar el liderazgo de las y los miembros, y no el suyo propio. Si bien la Secretaría lidera a la coalición a nivel operativo, es la membresía en su conjunto la que, en última instancia, decide la dirección de la coalición y toma las decisiones importantes, a través de consultas abiertas, periódicas y minuciosas donde la confianza es el principio organizativo central. Las consultas a la amplísima membresía de la coalición —desde las organizaciones de base hacia arriba— son una práctica corriente. En este sentido, BK-PLQP opera de manera similar al modelo de los movimientos de base. 

En la práctica, la Secretaría tiene el mandato de obtener el consentimiento de las y los miembros para ejecutar ciertas tareas o procesos. Para que esta modalidad funcione, es clave que exista confianza, por lo que una prioridad de la Secretaría asegurar que los temas «siempre estén sobre la mesa», a fin de que las y los miembros puedan comentar o participar en las decisiones importantes, reconociendo que algunas y algunos miembros serán más activos y tendrán más capacidad para participar que otros. En cuanto a la estrategia de incidencia de la coalición, la Secretaría de BK-PLQP propone opciones estratégicas para que las y los miembros las debatan, ofrezcan su retroalimentación y tomen decisiones durante la convención nacional anual, tras lo cual el consejo de 13 miembros electos da su aprobación final.  

Mantener la confianza de las y los miembros «esenciales», así como de quienes están menos involucrados 

La o el coordinador de las coaliciones nacionales identifica que, si bien generar confianza entre las y los miembros es crucial para lograr el funcionamiento eficaz de la coalición, debido a su amplio espectro y su dinámica, resulta inevitable que algunas y algunos miembros tengan más influencia que otros sobre la dirección de la coalición. El consejo de la coalición es muy práctico y las y los miembros del consejo tienden a provenir de las y los miembros más activos de la coalición: un núcleo de unas 20 organizaciones (cerca de un cuarto de toda la membresía). En efecto, si bien la elección para la membresía del consejo es abierta y transparente, el consejo se autoselecciona, ya que las organizaciones más activas en los asuntos de gobernanza de los recursos naturales tienden a presentarse para ocupar los puestos del consejo (como es el caso de muchas coaliciones de PLQP).  

En este contexto, el enfoque de la Secretaría de BK-PLQP de generar confianza y realizar consultas es muy importante. Cuando las y los miembros tienen una baja capacidad o participan menos activamente, llevar a cabo procesos abiertos implica que las y los miembros tienen la oportunidad de participar cuando ven que es crucial hacerlo. Los procesos abiertos se consideran esenciales para generar una adhesión continua de las y los miembros y para desarrollar consensos cuando sea posible, y se consideran críticos para generar confianza dentro de la coalición. La Secretaría señala que las consultas son una prioridad, un proceso continuo y constante y una actividad que suele plantear desafíos, y que la coalición en su conjunto es relativamente exitosa a la hora de generar consensos a pesar de las diferencias de opinión. 

Para facilitar la recaudación de fondos, así como para generar credibilidad entre los objetivos de incidencia, BK-PLQP está registrada como una organización formalmente constituida. Esta no es la norma en la red internacional, donde la mayoría de las coaliciones nacionales de PLQP funcionan de manera informal y las organizaciones miembro asumen responsabilidades institucionales de acogida de personal o gestión de fondos. Tener esta condición jurídica es otra razón por la cual resulta crítico que, de manera muy consciente, la Secretaría mantenga la cercanía con las organizaciones miembro de la coalición y con las comunidades a las que sirve. Dentro de la red de PLQP, la coalición de BK-PLQP tiene la reputación de gestionar con eficacia este delicado equilibrio de formalización y profesionalización, manteniendo a la vez la cercanía con las comunidades de la coalición a las que sirve.  

La necesidad de generar confianza para gestionar las tensiones 

La confianza resulta esencial también a la hora de gestionar las tensiones entre lo que se requiere a nivel nacional y lo que se necesita a nivel local. Por ejemplo, las y los defensores de la coalición involucrados en procesos nacionales han invertido siete años en acciones de incidencia para que el Gobierno y la industria atiendan los principios básicos de EITI y creen un sistema nacional de rendición de cuentas. Mientras que comunidades específicas pueden exigir métodos de rendición de cuentas que van más allá de los requisitos de EITI con el fin de, por ejemplo, poder monitorear los subsidios sociales y regalías, en un contexto donde las empresas preguntan «¿Qué más quieren de nosotras?»  En este contexto, la coalición busca apoyar a las y los miembros que exigen más rendición de cuentas a nivel local, sin que la incidencia a nivel nacional sea una limitante para la incidencia local. Impulsar esto implica llevar a cabo consultas con las y los miembros de forma abierta y constante, a fin de negociar las barreras y las prioridades.  

El rol del financiamiento en la operación de la coalición 

Al igual que con muchas coaliciones de PLQP, BK-PLQP se esfuerza por obtener financiamiento, y ha abogado insistentemente por él ante los gobiernos donantes y Organizaciones No Gubernamentales Internacionales(ONGI) que para que reconocen la importancia estratégica del sector extractivo de Filipinas. Como resultado, BK-PLQP ha obtenido financiamiento de apoyo institucional que permite mantener al personal de la Secretaría e impulsar, a la vez, que la coalición se enfoque en las acciones de incidencia.  Sin embargo, al igual que la mayoría de las coaliciones, BK-PLQP batalla constantemente para mantener este financiamiento y encontrar fuentes nuevas y constantes. En este sentido, el consejo de la coalición amplió su membresía en 2021 para incluir dos miembros independientes en el consejo alineados con su Misión, pero que no forman parte de las organizaciones miembro: uno especializado en recaudación de fondos y, otro, en marcos legales internacionales. De esta manera, la coalición busca expandir las habilidades del consejo para beneficiar a su Misión.

Si bien el acceso al financiamiento suele generar obstáculos, la visión de la coalición es evolucionar desde una estrategia liderada por las y los donantes (con un firme enfoque en la agenda EITI) hacia un enfoque basado en la incidencia, donde las prioridades de la incidencia se basen cada vez más en los asuntos que identifiquen las comunidades.  

Aprendizajes

• BK-PLQP ha creado un modelo de organización de la coalición que busca conseguir el equilibrio entre su formalización (una ONG registrada y formal con una Secretaría, financiamiento internacional, estrategia, objetivos, metas, políticas, sistemas de gobernanza, etc.) y mantener y priorizar la inclusión significativa de las y los miembros, como los grupos comunitarios, a través de relaciones basadas en la confianza y en un compromiso con elevar la voz de quienes no la tienen; atributos que combinan elementos del enfoque de «movimiento», con el enfoque de una red formal.  
• BK-PLQP ha identificado un modelo multi partícipe a través del cual puede impulsar que comunidades participen en la gobernanza de las industrias extractivas más allá de las cuestiones relativas a la divulgación de datos específicos. Podría ser beneficioso evaluar la eficacia de este modelo para beneficiar a las comunidades a fin de comprender si es posible replicarlo en otros contextos.  
• BK-PLQP está desarrollando sus estrategias para enfocarse en una agenda más amplia que vaya más allá de EITI pero manteniendo, a la vez, su cometido en esta iniciativa; en este sentido, ha buscado «sensibilizar» a las y los donantes sobre la necesidad de una meta más amplia. Al impulsar a las comunidades para que señalen los asuntos urgentes, la coalición las apoya para que pongan esas cuestiones en evidencia, tanto dentro de la coalición como en las acciones de incidencia. A medida que este proceso evoluciona, debería también orientar la estrategia internacional más amplia de PLQP, a fin de garantizar que esta se conecte con los asuntos que enfrentan las comunidades y les permita contar con plataformas para ejercer acciones de incidencia.
• La generación de confianza es un ingrediente fundamental para la creación de una coalición funcional, en especial cuando existe una inmensa diversidad entre las y los miembros en geografías desafiantes. Los sistemas de consulta de BK-PLQP podrían conformar un modelo útil para que otras coaliciones lo tomen en cuenta.  

Redactado por Brendan O’Donnell en base a entrevistas con el coordinador nacional de Bantay Kita -PLQP Filipinas, Vincent Lazatin.